FUNDAMENTO

Según el economista “hereje” chileno Manfred MaxNeef, las necesidades humanas son las mismas en todas las épocas y culturas. Lo que sí cambia de una época a otra (y de una cultura a otra) es la forma de satisfacerlas. Las necesidades identificadas son nueve: subsistencia, protección, entendimiento, participación, ocio, creación, libertad e identidad. La música tiene relación con varias de esas necesidades humanas.

Con la subsistencia, al relacionarse con el descanso y la salud mental.
Con la necesidad de afecto, al sustentar espacios de encuentro, permitir en ellos la expresión de emociones, pilares de la amistad. Con la de entendimiento, al promover la curiosidad, la disciplina y los ámbitos de interacción formativa. Con la del ocio, al justificar el uso del tiempo libre y la realización de espectáculos o acompañar nuestra privacidad.

Con la de Creación, para los que descubren y desarrollan habilidades en el canto, algún instrumento o la danza.
Para con la de libertad, para los que llegan a ser rebeldes y audaces. Y, por último, con la identidad: porque anima los sentimientos de pertenencia y autoestima (en este orden) porque constituye un símbolo, un lenguaje o un valor para determinados grupos, generando ámbito de contención (muy importante en los jóvenes), porque favorece el conocimiento propio y del otro; y porque cumple un rol constituyente en la memoria histórica de los pueblos.

Teniendo en cuenta estos enunciados, LUZ PARA MUNDOS REMOTOS pretende contribuir al desarrollo de la capacidad de audición atenta de la música del mundo, en sus eventuales y oportunos oyentes.

Río Colorado, Río Negro, mayo 2006.

TOUMANNI DIABATE-MALI

 


Toumani Diabaté es un músico maliense nacido el 10 de agosto de 1965. Es ampliamente reconocido por su virtuosismo en la kora, un instrumento de cuerda tradicional de África occidental.

Toumani Diabaté es considerado uno de los mejores intérpretes de kora del mundo. Su versatilidad y habilidad para fusionar diferentes estilos musicales lo han convertido en una figura influyente en la escena musical global. Además de interpretar la música tradicional de Malí, Diabaté ha colaborado en proyectos interculturales con músicos de flamenco, blues, jazz y otros estilos internacionales.

Como nos cuenta Toumani Diabaté, hay lugares «que son famosos por su petróleo, otros por la espiritualidad...  Malí es afortunada por su cultura». Las raíces de la música maliense se extendieron hacia el mundo.  De aquí partieron con los esclavos los ritmos que florecieron en el blues.  Y de aquí son algunos instrumentos, como la kora que él toca, únicos en el mundo.