FUNDAMENTO

Según el economista “hereje” chileno Manfred MaxNeef, las necesidades humanas son las mismas en todas las épocas y culturas. Lo que sí cambia de una época a otra (y de una cultura a otra) es la forma de satisfacerlas. Las necesidades identificadas son nueve: subsistencia, protección, entendimiento, participación, ocio, creación, libertad e identidad. La música tiene relación con varias de esas necesidades humanas.

Con la subsistencia, al relacionarse con el descanso y la salud mental.
Con la necesidad de afecto, al sustentar espacios de encuentro, permitir en ellos la expresión de emociones, pilares de la amistad. Con la de entendimiento, al promover la curiosidad, la disciplina y los ámbitos de interacción formativa. Con la del ocio, al justificar el uso del tiempo libre y la realización de espectáculos o acompañar nuestra privacidad.

Con la de Creación, para los que descubren y desarrollan habilidades en el canto, algún instrumento o la danza.
Para con la de libertad, para los que llegan a ser rebeldes y audaces. Y, por último, con la identidad: porque anima los sentimientos de pertenencia y autoestima (en este orden) porque constituye un símbolo, un lenguaje o un valor para determinados grupos, generando ámbito de contención (muy importante en los jóvenes), porque favorece el conocimiento propio y del otro; y porque cumple un rol constituyente en la memoria histórica de los pueblos.

Teniendo en cuenta estos enunciados, LUZ PARA MUNDOS REMOTOS pretende contribuir al desarrollo de la capacidad de audición atenta de la música del mundo, en sus eventuales y oportunos oyentes.

Río Colorado, Río Negro, mayo 2006.

ALBERT AYLER-EEUU

 


Albert Ayler (1936-1970) fue un saxofonista y compositor estadounidense, considerado una figura clave en el desarrollo del jazz de vanguardia y el free jazz. Nacido en Cleveland, Ohio, comenzó a tocar el saxofón alto bajo la guía de su padre, quien también era músico. Desde joven, Ayler mostró un talento excepcional, ganándose el apodo de "Little Bird" en referencia a Charlie Parker.

En la década de 1960, su música evolucionó hacia un enfoque más experimental, caracterizado por improvisaciones intensas, sonidos distorsionados y un vibrato amplio. Su álbum más influyente, Spiritual Unity (1964), marcó un hito en el free jazz, destacándose por su energía emocional y su ruptura con las estructuras armónicas tradicionales.

Ayler también incorporó elementos de himnos, marchas y música folclórica en sus composiciones, creando un estilo único que desafiaba las convenciones del jazz. 

Ayler dejó una huella imborrable en el mundo del jazz, siendo recordado por su valentía artística y su capacidad para transformar la música en una experiencia espiritual.