FUNDAMENTO

Según el economista “hereje” chileno Manfred MaxNeef, las necesidades humanas son las mismas en todas las épocas y culturas. Lo que sí cambia de una época a otra (y de una cultura a otra) es la forma de satisfacerlas. Las necesidades identificadas son nueve: subsistencia, protección, entendimiento, participación, ocio, creación, libertad e identidad. La música tiene relación con varias de esas necesidades humanas.

Con la subsistencia, al relacionarse con el descanso y la salud mental.
Con la necesidad de afecto, al sustentar espacios de encuentro, permitir en ellos la expresión de emociones, pilares de la amistad. Con la de entendimiento, al promover la curiosidad, la disciplina y los ámbitos de interacción formativa. Con la del ocio, al justificar el uso del tiempo libre y la realización de espectáculos o acompañar nuestra privacidad.

Con la de Creación, para los que descubren y desarrollan habilidades en el canto, algún instrumento o la danza.
Para con la de libertad, para los que llegan a ser rebeldes y audaces. Y, por último, con la identidad: porque anima los sentimientos de pertenencia y autoestima (en este orden) porque constituye un símbolo, un lenguaje o un valor para determinados grupos, generando ámbito de contención (muy importante en los jóvenes), porque favorece el conocimiento propio y del otro; y porque cumple un rol constituyente en la memoria histórica de los pueblos.

Teniendo en cuenta estos enunciados, LUZ PARA MUNDOS REMOTOS pretende contribuir al desarrollo de la capacidad de audición atenta de la música del mundo, en sus eventuales y oportunos oyentes.

Río Colorado, Río Negro, mayo 2006.

-J. GARBAREK-HILLIARD ENSEMBLE -NORUEGA

 


A los 14 años, escuchó a Coltrane en la radio, y quedó deslumbrado, como pájaro sin luz. Cuando el primer saxo llegó a sus manos, él ya estaba preparado. 

De Coltrane aprendió varias cosas: que había toda una música no occidental a descubrir, y la dinámica que debía tener un cuarteto. Por entonces, era frecuente que en los países escandinavos se organizaran giras y conciertos de músicos extranjeros. Así, pasaron por Noruega Dexter Gordon, Ben Webster, y Johnny Griffin. 

Pinta tu aldea, y serás universal.

El desembarco definitivo del saxofonista Jan Garbarek en el jazz contemporáneo, fue debido a su extensa colaboración con el pianista norteamericano Keith Jarret. A partir de 1974, y hasta fines de esa década,  Garbarek integró el cuarteto europeo de Jarret, y participó en los discos Belongings, Luminiscence, My song, Nude Ants, y Personnal Mountain. Posteriormente, Garbarek abandonó esas experiencias para preparar su trabajo personal, plasmada en una trilogía de discos: Dis, en 1976; Eventyr, en 1980; y Legend of the seven dreams, en 1988.

Todos ellos con algo en común: nos hablan de Noruega, sus paisajes, y sus tradiciones folklóricas.



KEITH JARRETT-EEUU

 


Recomendar un disco para escuchar en tiempos de pandemia puede ser una tarea imposible, por dos razones: primero, porque la simple elección de uno desmerece los miles de otros que sin dudarlo también podría estar recomendando, y segundo porque la cuarentena no constituye un estado de sentimiento estable asociado directamente a una música particular.

Independientemente de esta aclaración, me gustaría nombrar un disco de Keith Jarret que, en su síntesis sonora, representa para mí una pausa en el vértigo de lo cotidiano.

Grabado en 1998, el disco The Melody at Night, with you es un placer indiscutible que todos deben disfrutar. Realizado después de recuperarse del síndrome de fatiga crónica, Jarret encontró un sonido esencial que, según sus palabras en la entrevista para la revista Time, «… fue una de esos pequeños milagros para los que tienes que estar preparado, aunque parte de eso fue que simplemente no tenía la energía para ser inteligente. »


NORA SARMORIA-ARGENTINA

 

Pianista, acordeonista, compositora, arregladora y directora, Nora Sarmoria es una de las figuras más destacadas de la escena musical local; o, más ampliamente, de la escena rioplatense, ya que la mitad de su familia es uruguaya y, como ella dice, nació oyendo candombe y música brasileña. Su campo de acción es el folclore, en el que se educó de manera autodidacta.

 “Cuando yo me formé -comparte- no había escuelas de música popular. Empecé a escuchar al Cuchi Leguizamón, al Dúo Salteño, al Chango Farías Gómez, gente que me nutrió mucho además de todas una serie de influencias. Tuve también algunos profesores importantes, antes que nada una maestra de piano que venía a casa desde que yo era muy chiquita, y además un gran profesor de composición y armonía, que hoy vive en Canadá y ya no se dedica a la música: Edgardo Beilin, tan perfeccionista que como consideró que no era lo suficientemente perfecto se retiró. Un cerebro increíble, maestro de músicos como Ernesto Jodos, Adrián Iaies, Guillermo Romero”.

 El jazz es sin duda otra de las principales influencias de Sarmoria, aunque lo que ella busca con el jazz en cierta forma es “colonizarlo”, traerlo a su propio campo de acción. Así ocurre en su último disco, Thelonious & Cuchi, que reúne composiciones de Thelonious Monk y Cuchi Leguizamón, un álbum editado solo en formato digital (puede oírse por Spotify)



MANAL-ARGENTINA

 

Cada vez que se hace referencia a Manal se los menciona como "grupo fundacional" del rock argentino, junto a Los Gatos y Almendra.

Ante varios rechazos de demos, fue necesario que Jorge Alvarez (un famoso productor de la época y amigo de la banda) creara junto a Pedro Pujó su propia compañía discográfica (Mandioca) para que Manal pudiera sacar el primer simple: "Qué pena me das" / "Para ser un hombre más" (1968).

La consagración fue el Festival Pinap, organizado para fines de 1969. Ese año la banda se había presentado casi a diario, con lo que habían logrado una justeza instrumental admirable. «Fue el día más glorioso de mi vida artística -recuerda Gabis-. A Javier se le rompió la batería, a Alejandro se le rompió el bajo, a mí se me rompió no se qué, pero seguimos tocando y la gente deliraba. Terminamos los tres cantando en un micrófono: Alejandro con la guitarra, Javier con los palillos y yo con la armónica y la gente delirando. Manal se consagró ese día, se hizo un grupo grande. Ese día entró a la historia» (

 Con "Manal", su primer LP (1970), rompió con el tabú que no se podía hacer blues y rhythm & blues en castellano. "Jugo de tomate" y "Avellaneda Blues" son una prueba de ello.

Una gran oferta de la RCA convenció a Martínez de emigrar a una discográfica "comercial", y fracasaron con el segundo disco. Martínez desaparece durante un tiempo y luego, deciden que lo mejor era disolverse.

El grupo apareció fugazmente en el panorama local en agosto de 1987, bajo el mando de Javier Martínez, pero con  otra formación, duro poco, segundas partes nunca fueron buenas…


ATAHUALPA YUPANQUI-ARGENTINA

 


Atahualpa Yupanqui (que en quechua quiere decir "el que viene de lejanas tierras para decir algo"), es el seudónimo que utilizó Héctor Roberto Chavero Aramburo, que nació en Pergamino el 31 de enero de 1908 y falleció en Nîmes, Francia, el 23 de mayo de 1992. "Don Ata" fue cantautor, guitarrista, poeta y escritor, y un orgullo argentino.

Se le considera el más importante músico argentino de folclore, y su composiciones han sido cantadas por grandes intérpretes como Mercedes Sosa, Pedro Aznar, Los Chalchaleros, Horacio Guarany, Jorge Cafrune, Alfredo Zitarrosa, José Larralde, Víctor Jara, Ángel Parra, Jairo, Andrés Calamaro, Divididos, Marie Laforêt y Mikel Laboa entre muchos otros, y siguen formando parte del repertorio de innumerables artistas, en Argentina y en distintas partes del mundo.

Nació en el Campo de la Cruz, en José de la Peña, partido de Pergamino (al norte de la provincia de Buenos Aires) el 31 de enero de 1908, y realizó sus primeros estudios musicales con el Padre Rosáenz. Más tarde, a partir de los 6 años, aprendió guitarra con Bautista Almirón.

En 1986 Francia lo condecoró como Caballero de la Orden de las Artes y las Letras. En 1987 volvió al país para recibir el homenaje de la Universidad de Tucumán. Debió internarse en Buenos Aires en 1989 para superar una dolencia cardíaca, pese a lo cual en enero de 1990 participó en el Festival de Cosquín.

Sin embargo, a los pocos días Yupanqui cumplió un compromiso artístico en París. Volvió a Francia en 1992 para actuar en Nîmes pero se indispuso y allí murió el 23 de mayo. Por su expreso deseo, sus restos fueron repatriados y descansan en Cerro Colorado.



NUSRAT FATEH ALI KHAN-PASQUITAN

 

Nusrat Fateh Ali Khan era un músico y cantante paquistaní, contado entre las voces más grandes registradas. Fue principalmente un cantante de qawwali, la música devocional de los Sufis. Como cantante, fue bendecido con una voz extraordinaria y podía actuar a un alto nivel de intensidad durante varias horas. Nacido en una familia de cantantes y músicos consumados, desarrolló un interés temprano en la forma de arte.


Con la introducción de la música qawwali a audiencias internacionales, se le conoce popularmente como "Shahenshah -e-Qawwali ", que significa" El Rey de Reyes de Qawwali”. Nusrat Fateh Ali Khan fue uno de los primeros artistas en popularizar el qawwali para el público occidental. Poseía una extraordinaria gama de habilidades vocales, y su voz potente y embriagadora hipnotizaba audiencias no sólo en su Pakistán nativo, sino en todo el mundo.


Nusrat Fateh Ali Khan recibió el Premio del Presidente del Pakistán por el orgullo por su contribución a la música paquistaní en 1987. Fue galardonado con el Premio UNESCO de Música en 1995 y el Gran Premio de las Américas en el Festival de Cine Mundial de Montreal el próximo año. En agosto de 2010 fue incluido en la lista de CNN de los veinte músicos más icónicos de los últimos cincuenta años.
Se enfermó de insuficiencia renal y hepática en 1997 mientras estaba en Londres. Él sufrió un ataque cardíaco fatal y murió el 16 de agosto de 1997.  Tenía 48 años. 


QUIQUE SINESI-ARGENTINA

 

El guitarrista Quique Sinesi desliza con perfil bajo un talento capaz de evitar cualquier posibilidad de divismo.

El punto débil de este músico está en las melodías de sus composiciones. La mayoría de las veces son una excusa para condimentar el desarrollo armónico, rítmico y la improvisación. En cambio, demuestra grandes cualidades en su interpretación, en cada encuentro que hace con la guitarra y con el resto de los músicos.

Cuando toca solo, parecería que es el único que conoce los secretos de su guitarra de siete cuerdas. Le dedica arreglos con movimientos que llegan a la caja del instrumento perfectamente combinados, con trémolos, con armónicos que aparecen de golpe y salen corriendo, con una técnica depurada pero elástica, que le permite trabajar sobre los arpegios y las bordonas hasta alcanzar algunos colores que dan la sensación de que hay un segundo instrumento escondido en algún lugar.

fuente: https://www.lanacion.com.ar/espectaculos/musica/la-leccion-de-sinesi-ser-protagonista-sin-caer-en-el-divismo-nid323347/




RALPH TOWNER-EEUU

 

 Hijo de un trompetista y de una profesora de piano, el guitarrista, Ralph Towner, aunque de niño estudió ambos instrumentos, solo fue cuando entró en la Universidad de Oregon en 1958, cuando se dedicó en serio a la música. Allí estudio composición y teoría, además de profundizar en el aprendizaje de la trompeta, hasta entonces, su instrumento preferido. En 1962, decidió cambiar a la guitarra coincidiendo con el ultimo año de Universidad. En 1963, marchó a Austria donde estudió guitarra clásica durante todo un año en la "Vienna Academy of Music" con el profesor, Karl Sheltt. Un breve periodo de interrupción lo traslada a su país de nuevo con la intención de doctorarse en sus estudios, y nuevamente regresa a Viena para continuar con Sheltt, ya hasta 1967.

Dijo de su proceso creativo: "...frecuentemente, trabajo sobre mis improvisaciones hasta que una combinación particular de sonidos captura mi atención. Si estuvieras en una playa rocosa y comenzaras a golpear entre sí algunos pares de piedras hasta que encontraras dos que producen una chispa eléctrica, sería una situación análoga a identificar un motivo a partir del que crece una pieza entera de música. Ser capaz de distinguir una serie de sonidos placenteros de una idea musical real es una de las características de ser un compositor. La pieza final narra una historia, pero con el lenguaje de la música, que contiene a todas las emociones de la literatura y la vida pero sin palabras"...